Las criptodivisas de menor tamaño y menos conocidas, como Solana y Cardano, retomaron el alza que comenzó la semana anterior tras un fallo judicial considerado positivo para la industria de activos digitales.
XRP, que experimentó casi un aumento del 100% el jueves pasado después de que un juez federal declarara que el token no era un valor cuando se ofreció al público en los intercambios, lideró nuevamente las ganancias. El token aumentó hasta un 12%, alcanzando los 85 centavos el miércoles, impulsado por la especulación de que Ripple Labs podría llegar a un acuerdo en su prolongada disputa sobre XRP con la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos (SEC).
Bitcoin, que representa aproximadamente la mitad del valor del mercado de criptomonedas de 1.2 billones de dólares, se mantuvo prácticamente sin cambios en 29,934 dólares a las 5 p.m. en Nueva York. Ha estado operando en torno a los 30,000 dólares desde que alcanzó un máximo del año de 31,818 dólares el 13 de julio.
«Esto representa una inversión parcial del rendimiento del segundo trimestre, con Bitcoin elevándose y las altcoins cediendo terreno. Quizás se trate simplemente de un cambio de percepción respecto a que las principales altcoins sobrevivirán y crearán un nicho regulado estable», comentó Aaron Brown, un inversor en criptomonedas que escribe para Bloomberg Opinion.
Las altcoins se vieron afectadas en el segundo trimestre debido al creciente número de monedas que la SEC considera valores no registrados, lo cual dificulta la negociación de esos activos. Bitcoin no enfrentó una carga similar, ya que registró un aumento del 7% durante el mismo período, debido a que las autoridades estadounidenses lo clasifican como una mercancía.