Masterhacks – Durante la semana pasada se han visto varios reportes sobre la filtración del código fuente de Windows 10, pero hasta el día de ayer, Microsoft confirmó la filtración a The Verge y dio algunos detalles.
Muchos afirmaban que se trataba de la filtración completa del código, equivalente a 32 GB, sin embargo, Microsoft afirmó que fueron 1.2 GB de código, correspondiente a los controladores USB, de almacenamiento y WiFi.
Los datos habrían sido publicados en Beta Archive, pero los mismos administradores del sitio tomaron la decisión de eliminarlos por razones de seguridad y legalidad.
Este código pertenece a los datos que Microsoft comparte con socios y fabricantes por la iniciativa Shared Source. Aunque no ha sido posible identificar la fuente de la filtración, Microsoft cree que entre los socios y fabricantes se produjo.
Expertos en seguridad informática especulan sobre un posible ataque a los sistemas de Microsoft en marzo pasado o a los fabricantes.
Lo que se destaca, es que esta filtración puede afectar a los usuarios finales, ya que piratas informáticos podrían manipularlos y ocultar malware para tomar control de los ordenadores.