Google Chrome tiene un fallo que permite el acceso a las redes WiFi de millones de usuarios, según informó un medio británico.
Por medio de un sencillo proceso, es posible obtener el acceso a la red inalámbrica de quienes utilizan Chrome y Opera, según informa el diario.
Esto podría deberse a la poca seguridad de dichos navegadores al gestionar la posibilidad de almacenar las credenciales del administrador del router y así utilizar las claves de forma automática en un proceso que hace más cómodo el uso a los usuarios.
En pocas palabras, las claves guardadas no cuentan con encriptación, por lo que los hackers pueden acceder a las redes inalámbricas.
«El hacker podría unirse a la red WiFi, acceder a archivos compartidos, acceder a dispositivos del Internet de las cosas que se encuentran en la red local y ver qué sitios web visitan todos los usuarios. Siempre existe una relación entre seguridad y comodidad, pero nuestra investigación muestra de forma clara que la función de los navegadores web de almacenar credenciales de inicio de sesión está dejando a millones de redes domésticas y comerciales abiertas para atacar, aún si esas redes supuestamente están protegidas con una contraseña segura», dice el medio.
Sin embargo, los investigadores aseguran que existen algunas limitaciones que impiden la funcionalidad del ataque, por ejemplo, para acceder a la red, el atacante debe estar primero dentro del rango de alcance de la señal inalámbrica, además de hacer uso de los navegadores ya mencionados.