El ayuntamiento de Los Altos (California) ha catalogado de propiedad histórica el número 2066 de la calle Crist Drive. La casa no tienen nada de particular, una más de las anodinas viviendas unifamiliares de una planta, con su jardín a la calle, su garaje y sin vallas. Lo único excepcional es quien la habitó en los años 60, Steve Jobs.
La casa fue donde creció el fundador de Apple y donde comenzó a diseñar artesanalmente, en compañía de Steve Wozniak, el primer centenar de computadoras Apple I. Del centenar, 50 fueron vendidas a una tienda cercana por 500 dólares de entonces. La casa ha continuado en manos de la familia, pues en la actualidad la habita su hermana Patricia, que no estaba conforme con la protección municipal que, a partir de ahora, le impedirá realizar modificaciones sin permiso oficial previo.
A falta de monumentos, museos (no tecnológicos) o viejos edificios, los ayuntamientos de Silicon Valley jalonan con placas y monolitos los lugares en donde se crearon grandes empresas o se desarrollaron invenciones, como el garaje de Bill Hewlett y David Packard que en 1939 crearon HP en una casa de Palo Alto.
La casa donde vivió hasta sus últimos días Steve Jobs, otra unifamiliar pero con una arquitectura colonial hispana que la hacía más atractiva, también fue declarada de protección oficial por su valor histórico. Esa declaración le impidió a Jobs ampliar su casa, aunque posteriormente se llegó a un acuerdo del traslado pieza a pieza a otro lugar a cambio de poder construir una mayor en la misma parcela. Sin embargo, la muerte de Jobs no le permitió emprender este nuevo proyecto.
Fuente: Elpais