Intel reconoció la falla que tienen sus procesadores fabricados en los últimos diez años, que permitiría a los hackers robar información sensible de computadoras.
La compañía afirmó que se encuentra trabajando en una solución que no ralentice de forma significativa las computadoras, ya que se había informado que la solución afectaría al rendimiento con un rango de entre 5 y 30 por ciento.
Intel señaló que el problema era más grande y no sólo sus chips tienen este problema, sino también Advanced Micro Devices Inc (AMD), ARM Holdings y otros fabricantes. Asímismo, la compañía negó que los parches hagan más lentas las computadoras con chips fabricados por la empresa.
«Intel comenzó a proporcionar actualizaciones de software y firmware para reparar estas vulnerabilidades», informó Intel.
«Contrariamente a algunos reportes, cualquier impacto en el rendimiento depende de la carga de trabajo, por lo que para el usuario medio de la computadora, no debe ser significativo y se mitigaría con el tiempo», agregó.
Por otro lado, Phil Hughes, portavoz de ARM, dijo que la empresa trabaja con AMD e Intel para arreglar una falla de seguridad descubierta por investigadores, pero que no se trata de un defecto de arquitectura y que los parches ya fueron compartidos con los socios de las compañías, incluyendo a la mayoría de los fabricantes de smartphones.
Este defecto afecta a la memoria kernel en microprocesadores Intel x86 que se fabricaron en la última década, informó The Register.