Se trata de una computadora personal diseñada y fabricada por Apple Computer a principios de la década de 1980, siendo la segunda computadora en tener una interfaz gráfica de usuario.
Esta máquina no tuvo mucho éxito comercial y desapareció del mercado a los pocos años de su lanzamiento, sin embargo era un micro ordenador muy avanzado para su época, siendo pionero en integrar un conjunto de avances tecnológicos a nivel de hardware y software que terminaron convirtiéndose en estándares de la industria de la computación, como el ratón, la interfaz gráfica de usuario, sistema de mapa de bits, entre otros.
El proyecto Lisa fue iniciado por Apple en 1978, y en diciembre de 1979, una delegación de Apple que era liderada por Steve Jobs visitó las oficinas de Xerox PARC, en Palo Alto, California.
Xerox buscaba en ese momento ser inversor de Apple, y en una de las visitas de Jobs y su equipo, formado por los ingenieros John Couch, Bill Atkinson, Bruce Horn, entre otros, lograron observar avances realizados en ese centro de investigación. Apple tomó el concepto del ratón de Xerox PARC, lo que dio un gran salto al desarrollo de Lisa.
En la documentación incluida en la computadora, Apple indicó que el nombre Lisa era un acrónimo para Local Integrated Software Architecture. Sin embargo, se cree que debido a que la primera hija de Steve Jobs, nacida en 1978, se llamaba Lisa, el nombre tenía una asociación personal, y que el acrónimo se inventó después para cuadrar con el nombre.
Andy Hertzfeld afirmó lo último diciendo que el acrónimo fue creado del nombre Lisa en otoño de 1982 por el equipo de mercadeo de Apple. The Lisa se presentó el 19 de enero de 1983 con un costo de 9,995 dólares. Contaba con un CPU Motorola 68000 con una frecuencia de reloj de 5 MHz y tenía 1 MB de memoria RAM.
Cuando la computadora Lisa fue absorbida por la línea de productos Mac, el nombre Lisa y su línea de desarrollo propia se dieron por terminadas. En 1987, Sun Remarketing compró al rededor de 5000 Macintosh XL y los actualizó.
En 1989, Apple Computer enterró cerca de 2700 Computadoras Lisa que no se vendieron, en un terraplén en Utah, consiguiendo además una exención de impuestos sobre la tierra alquilada para ello.
Las computadoras Lisa que hay en funcionamiento hoy en día, son consideradas como artículos de colección y pueden ser muy bien pagadas por los coleccionistas.
