El sitio abierto y colaborativo para el uso, la norma y el estilo del español promovido por la Fundación del Español Urgente, alcanzó en octubre el millón de páginas vistas en un mes y suma ya más de 50 millones de visitas desde su creación, según fuentes de la fundación.
Para el coordinador de la Wikilengua, Javier Bezos, es «una buena cifra» que «muestra que la idea de crear un sitio participativo para temas de lengua tiene su cabida en internet«.
Presentada en enero del 2008, la Wikilengua, según se explica en el sitio promovido por Fundación del Español Urgente (Fundéu BBVA), busca ser un punto de encuentro para todos los interesados en la lengua española, construido por su comunidad y donde se pueden compartir, con una orientación esencialmente práctica, dudas y dificultades frecuentes.
«Nada más lejos de ser una especie de portavoz de lo establecido por las Academias de la Lengua», explica Bezos.
Más bien al contrario, como dijo el entonces director de la Academia Española, Víctor García de la Concha, en su presentación: «Puede servir de autopista de entrada» para la institución, porque no solo sirve de diccionario razonado de normas y dudas, sino que se reflejan usos, objeciones a las normas, criterios de estilo…
Gracias a las colaboraciones de los usuarios, de los que hay casi diez mil registrados hasta la fecha, la Wikilengua del español cuenta con más de 40.000 páginas y desde su creación ha recibido más de 50 millones de visitas.
La licencia de su contenido es de Creative Commons, la misma que la de la Wikipedia, aunque su propósito sea distinto que el de la popular enciclopedia.
Así, según Bezos, no solo se ofrecen datos objetivos, como en la Wikipedia, sino que «también se permiten opiniones fundadas o lo que en la jerga de la wikis se conoce como investigaciones originales; es decir, una persona que haya estudiado por su cuenta el uso de una palabra a lo largo de la historia puede aportar esos datos para que estén a disposición de todo el mundo».
En el último año la principal novedad ha sido la puesta en marcha, como recurso de la Wikilengua, de la base terminológica Plantae Mundi, que recopila nombres de plantas, científicos y vulgares, por países y lenguas, «una tarea enorme que requiere el trabajo de muchas personas«.
Este recurso se creó tras un acuerdo de colaboración con el especialista Ricardo Bruno, que buscaba una plataforma colaborativa que llegara a todo el planeta.
«Aunque en principio la Wikilengua es específicamente para el español, no se excluyen nombres de otras lenguas, porque pueden ayudar a establecer equivalencias con nombres en castellano allí donde sea posible», aclara Bezos.